Norte Verde Corte Suprema

La re-interpretación de una fachada clásica da pie al modo arquitectónico que propone este edificio para dialogar con la escala del barrio donde se emplaza, lugar en el que predominan las construcciones de dos pisos. Por eso, rescatamos en los dos primeros niveles el ritmo de llenos y vacíos de las casas de inicios del siglo XX: zócalos, balaustres y cornisas. Luego, en los pisos superiores, el edificio se plantea neutro y horizontal en su desarrollo de fachadas, excepto por la esquina en los dos últimos pisos, que se plantea como un gran cubo, marcando presencia urbana y albergando los espacios comunes, los cuales se conectan en un paseo de actividades, dando cabida a lugares dispuestos al encuentro, donde la persona es la protagonista del espacio. La plaza en la azotea contempla la ciudad y da espacio a lo colectivo entre vegetación, mirador, salón gourmet, gimnasio exterior, zona para mascotas y bicicleteros. Un espacio exterior adaptable al habitar.